Muy buenos días y muchas gracias a todas y todos -tanto a quienes están presentes en este salón como a quienes nos acompañan a través de las plataformas virtuales- en esta conmemoración de los 10 años del Programa de Intervención Comunitaria de Universidad de Las Américas.

Los saludos iniciales han sido a muchas y diversas personas, lo que refleja también las muchas voluntades, experiencias, y vínculos que han surgido a partir de esta innovadora iniciativa pedagógica, que hoy es un modelo de formación reconocido como un sello institucional de nuestra comunidad universitaria.

El Programa de Intervención Comunitaria nace de una propuesta de la entonces Facultad de Ciencias de la Salud, donde quien fuera en ese entonces su decano, el Doctor Hernán Sandoval, luego de un proceso de observación y análisis del Informe del Minsal sobre Carga de Enfermedad de la Población y de los indicadores de los Determinantes Sociales en Salud, propone una actualización del perfil de egreso de las carreras de dicha facultad, con el fin de fortalecer la formación de nuestros estudiantes, al mismo tiempo que contribuir de mejor manera al desarrollo del Sistema de Salud.

Para ello, se estableció como fundamental el conocimiento y vínculo temprano de las y los estudiantes con los territorios, barrios y sus comunidades que serían, el día de mañana, pacientes o familiares de estos.

Luego, se suma a esta tarea la Facultad de Ciencias Sociales a cargo de quien fue su Decana, Francisca Infante, constituyéndose un equipo que, junto a directoras y directores de escuela, y académicos levantaron lo que conocemos hoy como la Línea de Intervención Comunitaria, componente pedagógico del Programa de Intervención Comunitaria, a través de la implementación de esta Línea Curricular que incorporaron todas las carreras profesionales de ambas facultades.

Esta concepción del sistema de salud, así como de la relevancia del desarrollo comunitario, es probablemente una de las razones que facilitó la posterior integración de estas facultades, en la que hoy es la Facultad de Salud y Ciencias Sociales, y que su resultado haya sido armónico y consistente.

Más tarde, en 2016, se suma también al PIC la Facultad de Arquitectura, a través de los proyectos de título de sus estudiantes, en su carrera de Arquitectura.

Hoy escucharemos de sus protagonistas las historias, realidad actual, y también los desafíos futuros de este Programa que hoy cambia de folio y que durante estos años ha visto egresar a miles estudiantes.

En estas breves palabras de bienvenida queremos reconocer la tremenda labor de persuasión que llevaron adelante tanto Hernán como Francisca, que hablaron -ya hace muchos años- de la relevancia del aprendizaje situado, de los territorios y de la Vinculación con el Medio cuando eran términos poco conocidos, incluso en el mundo universitario.

"El Programa" o "el PIC", como a veces le llamamos cotidianamente es lo que es hoy, por la perseverancia e incluso porfía de sus impulsores, que lo convirtieron en un Programa pionero en su momento, atributo que mantiene hasta el día de hoy.

Hoy, es un ejemplo de tributación entre las funciones de Docencia y Vinculación con el Medio de manera orgánica, sistemática y bidireccional. Y esperamos que crecientemente presente una integración entre las tres funciones misionales de la Universidad: Docencia, VcM e Investigación.

El PIC también ha servido como modelo para que otras facultades y escuelas trabajen con metodologías de aprendizaje situado -como lo es Aprendizaje y Servicio.

En el PIC, las y los estudiantes se vinculan con la realidad social y comunitaria y desarrollan capacidades profesionales orientadas a articular aprendizajes, dialogar y construir nuevos saberes en conjunto con la comunidad. 

Luego de una década de trabajo del Programa en las comunidades en que estamos insertos como Universidad, es un orgullo decir que hemos aprendido a trabajar para incidir en los territorios y co-construir junto a ellas oportunidades dirigidas a mejorar las condiciones de vida de las personas, al mismo tiempo que desarrollar en las y los estudiantes, capacidad de trabajo comunitario.

Este camino ha permitido que, como Universidad, nos hayamos incorporado al trabajo que muchos sectores y actores realizan desde la mirada de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pues ello nos permite sumar esfuerzos, contribuir a un diálogo fructífero y, sobre todo, construir cambios que se mantengan y desarrollen en el tiempo, con la participación de todos los actores relevantes en ello.

Como institución educativa, hemos avanzado hacia un alto grado de madurez institucional y somos parte importante del sistema de educación superior en Chile. Precisamente, en las próximas semanas, recibiremos la visita de pares evaluadores en el marco del proceso de re- acreditación institucional.

Tenemos confianza en este proceso que enfrentaremos, porque hemos mejorado nuestros indicadores en todas las áreas: el 90% de nuestros académicos regulares cuenta hoy con postgrado; aumentamos la tasa de retención de estudiantes de primer año de un 68% a un 80% en 2021; el área de Investigación incrementó las publicaciones en revistas indexadas sostenidamente, hasta llegar el año pasado a más de 260 publicaciones, ubicándonos como una institución destacada entre las universidades acreditadas en nivel avanzado, sin investigación. El área de Vinculación con el Medio estableció un sistema de evaluación que nos permite medir el impacto de la Vinculación con el Medio, necesaria para su acreditación, área en la cual destaca el Programa de Intervención Comunitaria con evaluación de impacto en las y los estudiantes, de las ocho dimensiones del modelo de formación y con el estudio de Línea Base, que realiza levantamiento de información de capital social en los barrios.

Pero, volviendo a la conmemoración del día de hoy y, para terminar, reitero nuestro compromiso como institución con la educación de calidad y en particular con el vínculo continuo y horizontal que hemos establecido a través del Programa de Intervención Comunitaria con las comunidades, agradeciéndoles la oportunidad de aprender y enseñar juntos.

Muchas gracias.